Son muchas las personas que deciden acudir a una clínica o centro de estética para hacerse algún retoque o para que el paso de los años no se note tanto.
No en todos los casos la operación sale bien, e incluso en alguno de ellos no solo dejan secuelas sino que incluso pueden llegar a costar la vida de la persona que se somete a este tipo de intervención.
Carlos Cuadrado, perito forense asegura que estamos ante una situación similar al de algunas clínicas dentales. “Te vas a un sitio en el que piden 40.000 y en otro que te lo hacen por 5.000 euros y muchas personas no asocian que la diferencia puede estar en la calidad del trabajo y en los materiales empleados”.
“Son clínicas que subcontratan profesionales y espacios también en hospitales”, afirma.
Cuadrado recuerda que “en España tenemos dos modalidades: el médico especialista en cirugía plástica, reconstructiva y estética que hacen el MIR y tenemos otros que son licenciados en Medicina que hacen un master que muchos son ‘on line’ sin prácticas y sus primeros pacientes son sus prácticas. Eso muchas veces no se avisa y las personas confían”.
“La Sociedad Española de Medicina Estética en su web tienen un listado sobre cuáles son los mejores masteres que se puede consultar”.
Además señala que “toda operación tiene sus riesgos y a veces complicaciones que no están previstas. Es importante también los consentimientos informados”.
En el caso de que tengamos complicaciones o no estemos contento con el resultado, Cuadrado señala que el centro donde nos hayan operado “tienen que ofrecer una solución” o se puede reclamar vía judicial para que la clínica inicial corra con el coste de una nueva operación en otro centro.