Escaleras apuntaladas y estructuras de madera que dan un aspecto de peligrosidad y precariedad a un edificio de 1775, del arquitecto Juan de Villanueva, conocido como el palacete de la infanta Carlota.
Julia lleva 70 años viviendo en él, desde que sus padres eran porteros del edificio. “He visto a Carrero Blanco venir asquí a visitar a su hermana”.
“Le pido al alcalde, que es tan humanitario, que tenga corazón y no nos deje en la calle a mí y a todos los vecinos”, ruega Julia.
“Eso es inhumano. Tengo muchísimo derecho a una vivienda, porque yo sé más de lo que callo sobre lo que ha pasado en este edificio”.
Julia reconoce que ella vive legalmente, “yo no soy ninguna okupa, tengo mi contrato y pago mi luz”.
Foto: redacción |Vídeo: Telemadrid
"Esta casa no está en ruinas"
Cree que hay una operación especulativa detrás, “porque esta casa no está en ruinas. Lo de apuntalar las escaleras es una estrategia para echarnos”.
El 24 de noviembre se cumple el plazo y Julia dice que ella no se va a marchar de allí, porque no puede ni llevar sus cosas a casa de su hermana, “porque vive en Ciudad Real y están confinadas”.
Dice sobre el pasado del edificio: "No creo que se le ocurra al alcalde dejarnos en la calle. Yo sé mucho, me callo más de lo que sé sobre los que han pasado por aquí"
“Solo le pido una vivienda social. Con 70 años aquí, Asuntos Sociales no me puede dar una habitación compartida o una residencia. De eso nada” dice Julia.