Un golpe brutal. Un dolor indescriptible y un riesgo evidente para su vida. El ciclista Egan Bernal sufrió fracturas graves en las vértebras, en el fémur, en las costillas, en el pecho.
Primera valoración: una posibilidad del 95% de no volver a caminar. Egan supo que tenía que tirar de fuerza de voluntad.
Caso único
Según su neurocirujano, es un caso único en el mundo: un paciente normal tardaría al menos tres meses en empezar a moverse. Bernal fue dado de alta en tres semanas.
En apenas noventa días ya empezó a entrenar con normalidad. Lo que para él supone regresar a la vida.