El Palacio Real ha sido testigo de cientos de historias. Y es normal porque el Palacio Real es el palacio más grande de Europa. ¡Chúpate esa, Buckingham Palace! ¡Es el doble que tú!
Aquí han vivido ocho monarcas. Sus consortes, cortes, primos, amigos, amantes de ellos y de ellas. Pero centrémonos en Carlos IV. De él se dijo que era "un divino tonto". Pero el más duro de todos con él fue su padre Carlos III, que ya lo veía venir. Sin embargo, Carlos IV no era lo peor que le podía pasar a España. Su hijo Fernando VII demostró que se pude ser más tonto aún.
Fernando llegó a pedir a Napoleón ser su hijo adoptivo. Si es más tonto no nace. Carlos IV estaría muy pendiente del tonto de su hijo, pero no mucho de Godoy, que aprovechaba las cacerías del rey para ejercer de valido del reino. También en la cama de la reina. Oh, sí.