Entrevista al Doctor Tomás Chivato, decano de la facultad de Medicina de la universidad CEU San Pablo y miembro correspondiente de la Real Academia Nacional de Medicina
Eutanasia, diagnósticos prenatales, manipulación de embriones, identidad sexual y de género o ensañamiento terapéutico son interrogantes que merece la pena debatir con sosiego y desde un punto de vista ético y humanista de las ciencias de la salud. Este es el objetivo del V Congreso Nacional de Bioética que, desde mañana lunes, se celebra en la universidad CEU San Pablo de Madrid.
La eutanasia no es un acto médico
En estos temas no vale cualquier modo de satisfacer nuestros deseos, porque puede afectar a otros derechos y al respeto por la dignidad humana y la vida. “Queremos contribuir –afirma el doctor Tomás Chivato, decano de la facultad de Medicina de la universidad CEU San Pablo y miembro correspondiente de la Real Academia Nacional de Medicina– a que los profesionales sanitarios y las personas puedan tomar decisiones argumentadas o formarse una opinión informada en torno a estos temas que están vigentes en el debate social”.
La manipulación de embriones es un avance, pero también entraña límites éticos
Ante cuestiones trascendentes para la vida como es la eutanasia, no son pocos los sanitarios que se acogen al derecho de objeción de conciencia para ser eximidos del cumplimiento de sus deberes profesionales o legales cuando su actuación es contraria a las propias convicciones éticas o morales.
En opinión del doctor Tomás Chivato, “La eutanasia no es un acto médico y aunque se objete, eso no significa que no siga acompañando al paciente durante todo el proceso, como es su obligación”.
