Los restos de Jaime Ostos se encuentran en Madrid. Su mujer Mari Ángeles Grajal ha trasladado temporalmente los restos del torero a Madrid. Los restos del torero se encontraban en Écija, su pueblo natal, pero Grajal decidió llevárselos sin avisar a los hijos de Ostos.
Los restos permanecerán en la capital hasta que coloquen la estatua honorífica en la localidad hispalense. La relación de los hijos con su madrastra nunca fue buena. Gabriela, una de las hijas del torero, también ha comentado que Grajal no está cumpliendo la voluntad de su padre ya que ni ella ni su hermano han recibido los enseres qué él les prometió.