Ante la aparición del nuevo filtro de moda en las redes sociales, Bold Glamour, Reino Unido y Noruega han decidido limitar el uso de estos filtros en las redes sociales como Instagram o Tik Tok. Ambos han prohibido a marcas e influencers usar estos filtros sin especificarlo en las publicaciones. Así todo el mundo puede saber si lo que está viendo es real o no.
El debate viene porque algunos consideran que su uso puede ser peligroso. Este filtro puede provocar síntomas de autoestima en los jóvenes usuarios de estas redes sociales, ansiedad provocada por una preocupación excesiva por el físico y una percepción distorsionada de la realidad que puede crear complejos y metas de belleza inalcanzables.