Se esperan cerca de 8 huracanes este año y alguno podría llegar a España
El último huracán que pasó por nuestro país fue Leslie
REDACCIÓN
Mario Picazo nos explica cada semana desde Los Ángeles algunas curiosidades relacionadas con el tiempo y la Naturaleza. En esta ocasión hemos podido hablar con él acerca del extraño comportamiento de las ratas durante la pandemia del coronavirus, del comienzo de la temporada de huracanes en la zona atlántica y el preocupante deshielo de la zona del Ártico.
Ratas más agresivas
Durante el periodo de confinamiento derivado de la pandemia del coronavirus se ha visto un extraño comportamiento de las ratas. Estos animales han comenzado a invadir zonas que antes no visitaban y además presentan una actitud más agresiva. ¿La razón? Están hambrientas.
El presentador Mario Picazo nos explica que efectivamente se ha visto una mayor cantidad de ratas en las zonas de Estados Unidos más afectadas por el coronavirus y por tanto, en donde más medidas de confinamiento se han tenido que imponer. Por ejemplo, en Nueva York, Nueva Orleans y Chicago.
Las ratas se alimentan sobre todo de los desperdicios de alimentos que tiran los miles de restaurantes y colegios de las grandes ciudades. Por culpa del confinamiento, todos ellos cerraron y las ratas no encuentran comida. De hecho, muchas de ellas se han tenido que alimentar devorando a sus propias crías.
Un año intenso de tormentas y huracanes
Los expertos han vaticinado un 2020 muy intenso en cuanto a tormentas y huracanes se refiere. En junio comienza la temporada de huracanes en la zona atlántica y se prevé que lleguen entre 16 y 18 grandes tormentas, cuando lo normal es que sean 12. De ellas, ocho pueden convertirse en huracanes y cuatro en grandes huracanes, de intensidad dos o tres.
¿Podría llegar alguno de estos huracanes a España? Sí, lo mismo que ya ocurrió con Leslie, una tormenta tropical que se intensificó hasta transformarse en huracán y que afectó sobre todo al norte del país.
Las condiciones actuales de altas temperaturas en el Atlántico, vientos alisios más relajados y vientos de altura flojos, hacen que las condiciones sean más favorables a la formación de tormentas muy intensas.
Los nombres de las tormentas, por cierto, alternan nombres masculinos y femeninos. Los siguientes serán Cristobal, Eduardo y Dolly, nombres que se repetirán a los seis años, al menos que uno de ellos haya sido especialmente violento. En ese caso, ese nombre no volverá a usarse más, como ocurrió con el huracán Catrina.
El tema de las altas temperaturas es especialmente preocupante porque este año se han llegado a registrar temperaturas de hasta 12 grados en el Ártico. Unas temperaturas que aceleran el deshielo y que ya han dejado al descubierto zonas verdes en medio de las placas de hielo.