Ángela, organizadora profesional, nos ofrece algunos tips para hacer el cambio de armario de la mejor forma. Una de las prendas que normalmente es la que primero queremos guardar son los jerséis. Lo ideal es lavarlos una semana antes y guardarlos en cajas, doblados en forma vertical para que ocupen menos.
En las mismas cajas podemos mantener un orden, por ejemplo, donde están los pijamas de verano, guardar también los de invierno. En su interior podemos guardar antipolillas como madera de cedro. En el armario, "siempre dejamos algo de entretiempo para que, cuando llegue otoño, no nos pille sin nada".
Las prendas que podemos mantener durante todo el año en el armario son los vaqueros largos y las camisetas de maga corta, pero cuando llegue el verano tener más a mano los shorts. En cuanto al calzado, si tenemos un zapatero, podemos tener todavía todo a nuestro alcance. Ángela tiene un falso tablero donde guarda en la parte baja los de invierno y colocados a la vista en la de arriba los de verano.
En cuanto los abrigos, los mejor para estas prendas es aprovechar para lavarlos antes de guardarlos en el armario en verano para que se sequen bien y rápido. Asimismo, la ropa que no nos hemos puesto en invierno deberíamos de donarla. "Cuando le hemos dado una oportunidad y esa oportunidad no ha llegado es que tenemos que decirle adiós".