La Federación Española de Ascensores (FEEDA) pondrá en vigor una nueva normativa de revisión y actualización de ascensores para estar acorde con las medidas de seguridad más modernas.
De entre 800 a 30.000 euros son las derramas que podrían llevarse a cabo en cuatro de cada diez fincas españolas.
Algunas de estas medidas son: sensor de movimiento alrededor de toda la puerta, teléfono de emergencias o nivelación de los elevadores. Todas estas medidas pretenden evitar incidentes muy comunes; tropiezos, golpes o mascotas atrapadas.
El 1 de julio es cuando entra en vigor
Las comunidades cuyos ascensores que no pasen las inspecciones a partir de esta fecha, se verán obligados por ley a actualizar o cambiar los mismos.
Deseamos mucha suerte para que no sean demasiado caras estas derramas, en caso de ocurrir.