Las 120 familias propietarias de un piso en un edificio de El Cañaveral en Vicálvaro están desesperadas. La constructora les entregó las llaves para que entraran a vivir, pero desde entonces viven con un cuadro de luz de la antigua obra.
Comparten la electricidad con los vecinos y no pueden enchufar todo a la vez porque les saltaría la luz, por lo que se ven obligados a calentar sus casas con estufas de gas. "Es muy poca potencia la que tenemos para todos".
Sergio tiene que irse a casa de sus padres para ducharse porque tampoco tienen agua caliente. "Es triste que un piso con aerotermia, con suelo radiante, con suelo refrescante, con climatización y que se supone que son de muy alta calidad tengas que estar sin radiadores eléctricos y sin agua caliente. Pisos de 350.000, 400.000 euros".
Irian ya se ha mudado a este piso con su mujer y su hijo de 2 años porque no podía afrontar la hipoteca y un alquiler. Sin ascensor por momentos, cocinando en hornillos, sin agua caliente, calentado las casas con estufas de gas.
David y Segundo son propietarios, pero aún no se han mudado. No se atreven al ver el estado del edificio. Asimismo, tampoco pueden acceder al garaje. Llevan así demasiado tiempo y sueñan con una solución lo antes posible.