Un hombre, diplomático de carrera, está al frente de la colonia de 2.500 japoneses que viven en Madrid. Se llama Masashi Mizukami, y es el embajador de Japón en España desde 2016.
El embajador Mizukami nos abre las puertas de su embajada, donde trabajan más de 52 personas entre diplomáticos y personal, y de su rincón más íntimo, su despacho, para contarnos lo que ocurre en este trocito de Japón ubicado en plena calle Serrano.
También conocemos la residencia del embajador de Japón en el exclusivo barrio de Puerta de Hierro. Un imponente palacete adquirido por el gobierno japonés al Príncipe de Baviera, Fernando de Baviera y Mesía, primo segundo del rey Juan Carlos.
En las cocinas de la residencia conoceremos a la esposa del embajador, Eriko. Acompañada del prestigioso chef japonés Masaharu Tada, nos hará un plato muy especial y nos cuenta cómo es la vida de la mujer de un embajador.
Después de los embajadores, el que más manda en la Residencia es Alberto, el mayordomo de la Embajada que nos habla del estricto protocolo japonés. ¿Sabían que la distancia entre plato y plato en una mesa de gala está medida milimétricamente?
Comprobamos que detrás de la apariencia de hombre serio se esconde un hombre con un extraordinario sentido del humor. Nos habla de su familia, de su afición por la fotografía, y el badminton.
También acompañamos al embajador en actos oficiales como el celebrado en el Hotel Palace para promocionar el turismo español en la provincia japonesa de Gifu. Y asistimos como invitados de excepción a la celebración de la Fiesta Nacional, una recepción espectacular con más de 500 invitados que se celebra cada año con motivo del cumpleaños del emperador Akihito.
Pero no nos olvidamos de los japoneses que han hecho de Madrid su segundo hogar. Conocemos a Hiroshi Kobayashi, primer sumiller japonés en España y su peculiar restaurante en la zona de Ríos Rosas y a Kayoko Takagi, una profesora de japonés, casada con un diplomático español.