La crisis del transporte, la crisis post-brexit y la pandemia son elementos que están afectando al comercio internacional, pero desde hace días también al sector de las bebidas espirituosas. Algunas marcas ya están sufriendo problemas de desabastecimiento y con la campaña de navidad a la vuelta de la esquina.
La Covid lo paralizó todo y ahora que la demanda se dispara con el levantamiento de las restricciones, coincide con la crisis energética.
Una tormenta que desde el sector están convencidos de que amainará en unas pocas semanas y que no afectará a la campaña de Navidad.
Por ejemplo desde 'Espirituosos España' se desmiente "categóricamente" que esta situación coyuntural se deba a un aumento exponencial del consumo, sino a problemas derivados de la inestabilidad en los mercados.
"Aún queda mucho camino para recuperar los niveles pre-Covid, algo que en ningún caso se vislumbra alcanzar hasta 2023, y ello además dependerá de los planes de recuperación. Hay que recordar que la crisis económica de la que nos estábamos recuperando hasta que apareció el Covid, redujo las ventas de espirituosos por encima del 30%", señalan.