Poco antes de la llegada de verano, con menos ropa y más piel a la vista, muchos eligen hacerse un tatuaje.
El problema surge cuando acuden a personas no profesionales y que no están preparadas para hacerlo.
En España unos 6.000 tatuadores profesionales se enfrentan al intrusismo de unas 15.000 personas que no cumplen los requisitos necesarios.
Recuerdan que a pesar de estar encuadrado en la categoría de “Salón de Belleza”, el sector artístico del tatuaje tiene que cumplir con unos exigentes requisitos; tanto de alta cualificación técnica de los profesionales que ejercen esta disciplina, como de estrictos controles para la protección sanitaria de las personas que acceden al tatuaje.
Sin embargo, las homologaciones por parte del Ministerio de Sanidad no se cumplen de la misma manera en todas las Comunidades Autónomas, siendo éstas, aplicadas de manera distinta en cada una de ellas.