Estados Unidos anunció este miércoles un nuevo paquete de ayuda para Ucrania valorado en 175 millones de dólares y que por primera vez incluye munición con uranio empobrecido para tanques.
Esa munición de 120 milímetros de calibre va destinada para los tanques Abrams, detalló el Pentágono en un comunicado que añade que también habrá material para apoyar el sistema de defensa aéreo ucraniano y munición adicional para los lanzacohetes HIMARS.
El uso de proyectiles con uranio empobrecido, que tienen mayor capacidad para perforar blindados, ha sido durante mucho tiempo un tema controvertido debido a sus posibles impactos en la salud y el medioambiente.
Denuncia de Rusia
Por su parte, Rusia indicó que el empleo de proyectiles con uranio empobrecido es un "acto criminal" que conduce a una escalada, según el viceministro de Exteriores, Serguéi Riabkov.
"Esto es, de hecho, un acto criminal, no puedo dar ninguna otra evaluación", dijo el "número dos" de la diplomacia rusa.
Rusia asegura que es una "muy mala noticia" por las consecuencias para la población del territorio en la que va ser empleada.
Recordó que este tipo de munición se utilizó activamente en Yugoslavia con "consecuencias muy, pero muy tristes, registradas inclusos por organizaciones internacionales".
El anuncio coincide con el ataque ruso contra un mercado en el que han fallecido 17 civiles ucranianos.
Ayuda económica
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, visitó este jueves la provincia ucraniana de Chernígov (norte), donde acudió a un centro de entrenamiento para la retirada de minas y prometió 90 millones de dólares (84 millones de euros) adicionales para esa tarea.
Según una publicación del secretario de Estado en sus redes sociales, además del centro de adiestramiento, en el segundo y último día de su visita a Ucrania visitó además a la guarda fronteriza que vigila la frontera con Rusia.
Blinken recordó además que Estados Unidos proporcionará 300 millones de dólares para apoyar a las fuerzas del orden ucranianas.
La cuantía forma parte del paquete de más de mil millones de dólares (más de 930 millones de euros) anunciado ayer tras la reunión de Blinken con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
Junto con el paquete destinado a las fuerzas del orden, Estados Unidos también enviará otros 206 millones de dólares adicionales en “asistencia humanitaria” relacionada con el acceso a alimentos, agua y vivienda para las víctimas de la agresión militar rusa.
Finalmente, otros 203 millones de dólares se destinará a “apoyar los esfuerzos de transparencia y responsabilidad de las instituciones, a promover los esfuerzos en hacer reformas clave relacionadas con la lucha anticorrupción, el Estado de Derecho y el sistema de justicia” y a investigar y perseguir los crímenes de guerra rusos.