Feijóo propone ampliar la tarifa plana hasta los 35 años y acusa a Sánchez de querer "comprar" a los jóvenes con cheques
Díaz Ayuso exige a Sánchez que deje de tratar a los jóvenes como borregos
Foto: EFE |Vídeo: Telemadrid
REDACCIÓN / AGENCIAS
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha propuesto este lunes un paquete de medidas para dar "certezas" a los jóvenes, como ampliar la tarifa plana para autónomos a menores de 35 años, darles más facilidades para fundar empresas sin trámites burocráticos o bonificar el 100% la cuota empresarial de la Seguridad Social durante el contrato. Dicho esto, ha acusado al Gobierno de Pedro Sánchez de querer controlar a los jóvenes con "pancartas" y "cheques", en alusión al bono cultural de 400 euros al comprar los 18 años.
"La libertad no se compra ni se subvenciona sino que se adquiere a través de la formación y el conocimiento", ha proclamado Feijóo en la apertura de la segunda convención sectorial del PP centrada en los jóvenes bajo el título 'Juventud un proyecto de vida' que se ha celebra en el Centro Cultural Casa del Reloj de Madrid, en la que también ha participado la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Feijóo ha criticado que la izquierda se "arrogue la bandera de la juventud", como si "solo votase a un partido". "Considera la izquierda que los jóvenes son su caladero electoral y les pertenece a ellos, que no tienen capacidad de dirigir, decidir ni tomar ninguna decisión", ha aseverado.
En este punto, ha censurado que la izquierda pretenda "controlar" a los jóvenes con "cheques directos" y con "pancartas" cuando lo más importante es "su libertad" para "pensar, discrepar y votar en contra del establishment político". "No os resignéis", ha dicho a los jóvenes, para asegurar que "no deberían seguir los dictados de un Gobierno que los deja hipotecados".
Después, ha anunciado una batería de medidas que plantea el PP como ampliar la tarifa plana de autónomo hasta los 35 años, seguir incentivando en el impuesto de la renta la contratación de menores de 35 años en sus primeros empleos; dar facilidad para crear primeras empresas sin trámites; bonificar el 100% la cuota de la Seguridad Social durante la vigencia del contrato; o apoyar con deducciones fiscales a las empresas que acojan a estudiantes en prácticas. Asimismo, el jefe de la oposición ha apostado por un plan nacional de conciliación, que incluya entre otras medidas una apuesta por la flexibilidad horaria, el teletrabajo o la financiación de las escuelas infantiles.
Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha dirigido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para decirle que "la juventud no se compra con dinero" y le ha acusado de tratar a los jóvenes "como borregos".
Durante su intervención, la presidenta le ha lanzado un mensaje Sánchez respecto a políticas "erráticas" como el bono cultural: "La juventud no se compra con dinero". En este sentido, ha criticado que la izquierda hable de la juventud como "colectivo vulnerable" al que hay que "dirigir" y "tutelar" porque ha asegurado que tiene "en sí misma" la solución a la "inmensa mayoría de los problemas".
Ha insistido en la "cultura del esfuerzo" para que los jóvenes puedan prosperar, y ha subrayado como principales problemas de la juventud la soledad, las crisis identitarias en relación con las bandas juveniles, las nuevas tecnologías o las drogas.
En cuanto a la educación, ha rechazado las leyes educativas, como la conocida Ley Celáa, que a su juicio regalan aprobados e igualan "a la baja", y ha dicho que aunque las administraciones tienen un compromiso con los estudiantes que necesitan "más ayuda", no se debe aplicar el "falso igualitarismo" que dice que todos somos "iguales, igual de fracasados" y que regala "aprobados".
Ayuso ha apuntado a la soledad como uno de los principales problemas de los jóvenes, que ahora tienen "menos aficiones" y "grupos sociales", y ha criticado que a los niños se les ha quitado "años de infancia" y se les ha prolongado la "adolescencia", quitándoles también responsabilidad, lo que hace que pasen por "crisis identitarias".
También ha subrayado que cada vez más gobiernos han decidido "autolesionarse" con la amenaza de "las drogas", ha expresado el rechazo de su gobierno a ellas y a todo lo que "tiraniza y esclaviza", así como a "frivolizar" con las drogas, "como distintos partidos y administraciones, que nos va a llevar a un fracaso sin precedentes".
Ha cargado contra los "movimientos identitarios sobre el sexo" que enfrentan "al hombre con la mujer" y contra la cultura de la cancelación, de lo que a su juicio se aprovecha la izquierda porque pretenden que se "trabaje menos, se estudie menos y se odie más". "Nunca ha habido tanta desconfianza entre ambos sexos, somos compañeros, no enemigos", ha indicado.