Iglesias recomendará a su padre acciones legales contra Alvarez de Toledo por llamarle "terrorista"

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha anunciado este miércoles que va recomendar a su padre, Francisco Javier Iglesias, que emprenda acciones legales contra la portavoz del PP en el Congreso, Cayetana Alvarez de Toledo, por decir durante el Pleno que "es el hijo de un terrorista", al relacionarle con el Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (FRAP), que operó en los últimos años del franquismo y la Transición y no se disolvió hasta 1978.

"Usted acaba de cometer un delito aquí. Solo alguien con títulos nobiliarios es capaz de creerse con la impunidad de poder llamar terrorista a alguien y que le salga gratis", ha avisado el líder de Podemos en su turno de réplica, durante la tensa y bronca interpelación que ha protagonizado junto a la portavoz 'popular'.

Alvarez de Toledo, que se ha mostrado molesta de que Iglesias se refiera a ella como "señora marquesa" por el título nobiliario que ostenta, ha finalizado su segundo turno de intervención asegurando que los hijos no son "responsables" de sus padres. "Por eso se lo voy a decir por primera y última vez: usted es el hijo de un terrorista. A esa aristocracia pertenece usted, a la del crimen político", ha sentenciado.

Iglesias, a continuación, ha comenzado su respuesta volviendo a llamar "señora marquesa" a Alvarez de Toledo, y avisando de que por llamar terrorista a su padre no iba a conseguir que perdiera la compostura. Eso sí, ha dejado claro que va a recomendar a padre que "ejerza las acciones oportunas".

Al término de la interpelación, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha pedido a la portavoz del PP que retirara su afirmación sobre el padre de Iglesias, pero la dirigente 'popular' se ha negado, argumentando que el líder de Podemos había asegurado en una entrevista que su padre fue militante del Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (FRAP).

Duro cruce de acusaciones entre ambos

De esta manera, culminaba un duro cruce de acusaciones entre ambos que inició Álvarez de Toledo calificando a Iglesias de "embajador de ETA y Batasuna en el Gobierno" y "burro de Troya de la democracia", además de "discípulo de los ayatolás de Irán", "proahijado de Chavez y Maduro" o "prima de riesgo española".

La actitud de la portavoz del PP ha llevado a Iglesias a dirigirse, durante su segunda intervención, directamente al líder popular, Pablo Casado, porque cree que no es un estilo personal sino del partido, que ha decidido "colocarse en la ultraderecha", por lo que le ha pedido que "consulte con la almohada". Le ha instado a que reflexione y "no haga el camino inverso" al que realizó el fundador del PP, Manuel Fraga, al pasar de ministro franquista a crear uno de los partidos más importantes de la democracia, porque volver a esas posiciones de origen será "muy perjudicial" no solo para los populares, sino para toda España.

Álvarez de Toledo le había dicho, anteriormente, a Iglesias que el país no necesita "caudillitos carismáticos" que tutelen a los españoles como menores de edad, además de acusarle de "utilizar la pandemia para hacer avanzar su proyecto de "fracaso de la España constitucional". "Tienen un plan contra la democracia, apadrina a los que buscan la destrucción del Estado y quieren levantar un régimen autoritario de izquierda", ha afirmado, al tiempo que ha criticado la destitución del coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos como una "operación digna de una dictadura".

Para la portavoz del PP está claro que Iglesias "legitima la violencia e incluso la practica" con su defensa de los escraches o sus "amenazas" a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el líder de Vox, Santiago Abascal. "Si en España se condenaran las ideas, usted estaría en la cárcel", ha espetado.

Álvarez de Toledo interpelaba a Iglesias sobre los "acuerdos políticos con el nacionalismo radical", en concreto por el pacto del Gobierno con Bildu para derogar la reforma laboral, pero ha acabado en un cruce de descalificaciones.

Iglesias ha acusado a la portavoz del PP de "insultar y mentir" y ha asegurado que los populares se han dedicado a "poner zancadillas y alentar a la gente, junto a la ultraderecha, a vulnerar el estado de alarma" durante la pandemia.

Tras referirse al PP como un partido con "innumerables presos por delincuentes" y que defiende la corrupción, ha considerado que su obligación, como miembro del Gobierno, es "tenderle la mano" para que "arrimen el hombro" en defensa de los servicios públicos en España y por el interés general del país.