Madrid tendrá la zona más grande de bajas emisiones de toda Europa. Este es el objetivo del Ayuntamiento que este martes ha presentado los detalles del plan Madrid 360, la nueva ordenanza de movilidad sostenible en sustitución de Madrid Central.
Dentro de la capital habrá dos nuevas zonas de bajas emisiones, una en Centro y otra en Plaza Elíptica. La ordenanza permitirá al Ayuntamiento añadir restricciones a esas zonas si es necesario, según ha anunciado en el pleno municipal el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante.
Estas nuevas ZBEDEP se corresponderán con aquellos lugares con mayor problemática de contaminación, donde se podrán aplicar "medidas adicionales de manera permanente”.
Esta figura sustituirá a la zona de bajas emisiones de Madrid Central diseñada por el anterior Gobierno municipal de Manuela Carmena y cuya anulación ratificó hace dos semanas el Tribunal Supremo. Además, Carabante ha asegurado que al limitar el acceso a la ciudad de los vehículos sin distintivo ambiental a partir de 2024, Madrid se convertirá en "la zona de bajas emisiones más grande de Europa", al comprender los 604 kilómetros cuadrados de la capital.
Exclusión de vehículos en la M-30
A partir del 1 de enero de 2022 no podrán entrar dentro de la M-30 los vehículos ‘A’ de los no residentes y en 2023 se les vetará en la propia M-30. Progresivamente se irá limitando la circulación de estos coches hasta la prohibición total por toda la ciudad que llegará en 2025.
En 2024 los vehículos sin distintivo ambiental que no estén matriculados en la capital no podrán acceder a la ciudad y en 2025 la medida se extenderá a los residentes madrileños. Habrá un paquete de ayudas de 110 millones de euros para la renovación de vehículos antes de que se prohíban por completo.
Pancartas y chapuzas
Para la oposición, se quedan cortos y Más Madrid anuncia que acudirá a la UE. El alcalde de Madrid José Luis Martínez Almeida ha dicho al respecto que “es muy fácil las pancartas, los eslogans y hacer chapuzas. La pregunta que yo le lanzo a Más Madrid es por qué no hicieron lo que nosotros hemos hecho en apenas dos años de legislatura”.
En ello ha coincidido Cs, cuya portavoz y vicealcaldesa, Begoña Villacís, ha criticado que Madrid Central se tramitase “de manera anormal y chapucera”, y ha censurado que su anulación “no es culpa de quien lo recurrió (el PP), sino de la incompetencia” de quien lo sacó adelante.
Carabante ha anunciado esta medida en el debate de una propuesta de Más Madrid -rechazada con los votos en contra del PP, Cs y Vox- que llamaba a mantener Madrid Central, por ser, a su juicio, donde se considera “un referente” que “solo ha traído beneficios”.
Reivindicación de Madrid Central
La concejala de Más Madrid Esther Gómez Morante ha defendido que Madrid Central era uno de los planes de bajas emisiones “más eficientes” de toda Europa y que incluso los comerciantes, que “tenían dudas”, reconocen haber podido desempeñar su actividad “con normalidad, y ahora piden que se mantenga”. Frente a ello, ha agregado, el plan del PP “relaja las medidas” frente a la contaminación y “de momento solo es humo”.
Carabante ha acusado a Más Madrid de haber diseñado un plan que era “ineficaz, fracasado y una chapuza”, que además no daba pie a los madrileños a pronunciarse al respecto. Por el contrario, se ha mostrado confiado en que la figura de la ZBEDEP que proponen será “mejor, más sostenible, justa y eficaz”.
También Vox ha votado en contra de retomar Madrid Central, y su concejal Fernando Martínez Vidal ha acusado a Más Madrid de “no saber gestionar y ni siquiera saber tramitar” una normativa que, además, “ha complicado la vida” de los madrileños, entre los que ahora hay “desinformación y bastante cabrero”.
Por su parte, el PSOE ha defendido los resultados que estaba dando Madrid Central porque, según ha afirmado su edil Ignacio Benito, ha permitido “reducir la contaminación y que Madrid se acerque a los objetivos europeos”.