La jefa de Instituto de Toxicología ha declarado ante la jueza que no se puede descartar que Isabel, la tía de la mujer de Luis Lorenzo, muriese por causas naturales en vez de por envenenamiento. Argumenta que hay estudios que indican que los altos niveles de metales pesados que tenía en el cuerpo pueden producirse después de la muerte.
La jefa del Instituto de Toxicología se ha referido a la existencia de dos estudios médicos de Estados Unidos y China sobre personas que presentaban niveles elevados de cadmio en su cuerpo por causas ajenas al envenenamiento, y ha dicho que son "extrapolables" a este caso.
Aunque ha asegurado que la muerte no tiene por qué deberse a una intoxicación, tampoco ha querido contradecir la autopsia de la forense, que reveló que la mujer de 85 años falleció por un "envenenamiento" de "etiología homicida", al encontrarle en sangre niveles de cadmio y manganeso 200 y 20 veces superiores a una cantidad normal, respectivamente.
También ha subrayado la dificultad de que la muerte se produjese por una ingesta aguda de cadmio, pues ha indicado que el cuerpo solo absorbe el cinco por ciento del que ingesta y que para producirse el envenenamiento tendría que haber consumido un volumen alto de este metal.