El Bicentenario comenzó con sus 400 empleados cantando el cumpleaños feliz.
El Museo Real que acabó tomando el nombre del Paseo madrileño abrió sus puertas en 1819 con 311 pinturas y doscientos años después de sus paredes cuelgan 1.300 y tiene tres millones de visitantes. El buque insignia de la cultura española ha recibido el mejor de los regalos.
Un premio al público y al compromiso y dedicación de sus trabajadores. Por eso junto al director y a Javier Solana recogerá el galardón Laura, vigilante de sala. Empezó a trabajar en la pinacoteca con 18 años.
Una emoción y un cariño que ha sentido la sociedad. Un premio al pasado, al presente y al futuro. El broche de oro a un cumpleaños que es también el de una parte de la historia de España.