Los hospitales buscan cómo distraer al paciente para paliar los efectos secundarios del tratamiento de su enfermedad. En la unidad del dolor del Hospital de Getafe utilizan para ello gafas de realidad virtual.
Así evitan tener que administrar sedación o analgésicos en tratamientos largos contra el dolor.
Gloria sufre fuertes dolores desde que tuvo un herpes zoster el año pasado. Elena le coloca los parches que han hecho que desaparezca ya el dolor de un brazo.
Los parches tienen un componente derivado de la guindilla, que produce enormes picores durante la hora que dura el tratamiento.
Y así una situación que podría ser estresante se convierte en placentera.