En Rusia la represión a opositores detenidos sigue creciendo. Lo último ha sido 25 años de cárcel a Vladimir Kara-Murzá por publicar informaciones contra el régimen de Putin. Este lunes comparece ante la Justicia el corresponsal en Moscú del The Wall Street Journal, al que le piden 20 años de cárcel. Casos con los que Putin intenta acallar cualquier crítica.
Su abogada asegura que el gobierno estadounidense se comprometía a garantizar la seguridad de los opositores, aunnque la mujer de Kara-Murzá afirma que si le encarcelan seguirá luchando por sus ideales y por su país.
No es el único caso reciente. Alexei Navalny sufre de problemas en el estómago causados por un envenenamiento lento, según su representante, que le ha hecho perder 8 kg en menos de 15 días.
Otro caso. La detención de Evan Gershkovich, periodista de The Wall Street journal, hace 20 días acusado de espionaje. Aislado y con el único contacto con sus padres por carta, así vive el reportero que ha negado rotundamente los cargos del Kremlin.
Moscú acusa a Europa de politizar los derechos humanos, pero Gershokovich, Navalny, Kara Murza se suman a los 13.000 mil casos desde que comenzara la guerra de Ucrania.