Urkullu confirma que ni Rajoy quería el 155 ni Puigdemont la DUI
El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha detallado sus gestiones de "intermediación" entre los gobiernos español y catalán, un proceso en el que cree que ni Mariano Rajoy ni Carles Puigdemont querían el 155 ni la DUI, aunque las "presiones" sobre el Govern para que no convocara elecciones abocaron a ello.
Urkullu ha declarado como testigo en el juicio del 'procés', a propuesta de la defensa del exconseller de Territorio Josep Rull, un día después de que lo hiciera el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, quien aseguró que no hubo "ninguna mediación de nada" entre su ejecutivo y el catalán, pero que "escuchó a mucha gente" durante el 'procés'.
El lehendakari emprendió, ya en junio de 2017, su labor de "enlace" para aproximar a Rajoy y Puigdemont en un conflicto catalán que temía que se estaba "yendo de las manos" y las intensificó tras el referéndum del 1-O, especialmente los días previos al 27-O en que el Parlament aprobó la resolución sobre la DUI.
Urkullu se ha mostrado convencido de que Puigdemont no quería "en modo alguno" seguir adelante con la DUI y, durante las conversaciones, también se percató de que Rajoy "no era muy dado a la aplicación del artículo 155, realmente", aunque el expresidente nunca llegó a afirmar "taxativamente" que desistiría de activarlo si se convocaban elecciones en Cataluña.
Según el relato del lehendakari, a raíz de sus gestiones la madrugada del 25 al 26 de octubre de 2017 se alcanzó un "acuerdo" para convocar elecciones, y Puigdemont le confirmó su intención de hacerlo el mismo 26 de octubre por la mañana, una hora antes de la rueda de prensa en que tenía previsto anunciarlo. Esa misma mañana, ha añadido, habló con el exconseller de Empresa Santi Vila -que afronta una pena de siete años por los delitos de desobediencia y malversación-, y éste le explicó que había conversado con el entonces ministro de Justicia, Rafael Catalá, quien le había sugerido que mediara para evitar la DUI.
Sin embargo, ha relatado el testigo, hacia las 14.00 del mediodía Puigdemont le comunicó, "lamentándolo", que "no podía proceder al acuerdo" de convocar elecciones porque "las personas que estaban manifestándose en la plaza Sant Jaume se les estaban rebelando y también tenía presión en su grupo". "En el último instante", ha desvelado el presidente vasco, transmitió a Puigdemont que no podía ofrecerle "garantías" de que no se aplicaría el 155 si renunciaba a la DUI, pero sí tenía "una intuición" de que podría evitarse la suspensión de la autonomía.
Esa intuición se basaba, según el lehendakari, en que una vez disuelto el Parlament y convocadas las elecciones, aunque el Senado acordara el 155, la "disposición" entre formaciones políticas "hiciera que no se aplicara definitivamente". "Pero no hubo una repuesta taxativa por parte de Rajoy", ha aclarado el lehendakari.
Rufián
Por otro lado, el diputado del Congreso de los Diputados Gabriel Rufián se ha referido este jueves durante su declaración en el juicio por el 'procés' en el Tribunal Supremo como "fake news' al hecho de que la secretaria judicial que dirigió el registro de la Consejería de Economía el 20 de septiembre de 2017 tuviese que salir de madrugada por el tejado ante la masiva concentración a las puertas del edificio.
Así lo ha dicho justo al final de su declaración como testigo cuando el abogado de la acusación popular ejercida por Vox, Pedro Fernández, le ha preguntado sobre "si tenía conocimiento de que la comisión judicial tuvo que salir por un edificio colindante". "No, es una 'fake news' como que el castellano está reprimido en Cataluña", ha contestado.
Rufián, que ha comparecido ante el tribunal luciendo una chapa amarilla con un eslogán que pide la libertad de los acusados en prisión provisional, ha consumido parte de su breve comparecencia en utilizar alguna que otra salida de tono. "Soy asociado de la ANC, de la biblioteca de mi barrio y del videoclub", ha respondido cuando la abogada del Estado le ha preguntado sobre su pertenencia a la Asamblea Nacional Catalana.
Al inicio de su comparecencia Rufián ha avisado que contestaría a las preguntas de la acusación popular porque sus "compañeros" se lo han "pedido". "Pero me parece una vergëenza que estén aquí", momento que ha aprovechado para decir que el de Abascal es un partido "xenófobo, racista". El presidente del tribunal, Manuel Marchena, ha advertido a Rufián y a las partes que debían evitar cualquier opinión política y que tan sólo podría ser preguntado por la concentración ante dicha Consejería, ya que estuvo presente allí. "Los términos de debate los fija la defensa que lo ha propuesto", ha señalado el magistrado impidiendo en otro momento del interrogatorio que la abogada de la expresidenta del Parlament Carme Forcadell preguntase sobre los trámites que se realizan en la cámara baja.