La pandemia de Covid-19 disparó un 21% el fraude en el seguro de automóvil en 2020 frente al año anterior, si bien el coste medio de los intentos de fraude descendió un 13%, hasta los 1.130 euros. Estas son algunas de las conclusiones extraída del 'VI Barómetro del Fraude del Seguro', elaborado por Línea Directa y presentado este lunes en una rueda de prensa por la directora de Personas, Comunicación y Sostenibilidad de la aseguradora, Mar Garre.
Línea Directa señala que existen tres requisitos que definen un fraude: "Tiene que haber un engañado, con una voluntad deliberada de cometer un delito, o sea, con dolo, y tiene que haber un lucro para la persona que está engañando y haciendo una declaración falsa", ha señalado Garre.
Además, destaca que estos engaños "hacen que se encarezca el seguro para todo el resto de la sociedad, y acaban pagando justos por pecadores. Entre 2019 y 2020 se han detectado 75.000 intentos de fraude con un coste medio de 1.130 euros, alrededor de 70 millones de euros en total, lo que acaba incrementando las primas de los seguros".
Sobre el seguro de automóvil, Garre ha resaltado que en 2020 se dio un "récord absoluto en la declaración de partes fraudulentos", ya que, a cierre de ese ejercicio, siete accidentes de cada 100 eran falsos. Sin embargo, el coste medio de estos engaños "bajó notablemente", hasta alcanzar los 1.130 euros, un 13% menos.
Al respecto, Garre ha señalado que una parte de 2020 estuvo marcada por los confinamientos, que llevó a una menor movilidad y menor número de accidentes. "Por eso, el crecimiento en los intentos de fraude llama más la atención".
Sin embargo, se produjeron "fraudes menos sofisticados", con menor número de lesiones corporales "que son los que incrementan muchísimo el coste medio de los partes fraudulentos".
Sobre la tipología, la directiva ha señalado que descendieron los daños corporales en 2020, un 11%, aunque "se mantienen en niveles altos frente a años anteriores".
Con respecto al perfil de personas que suelen cometer fraude al seguro del coche, Línea Directa afirma que se trata de hombres jóvenes, de entre 18 y 24 años, con trabajos precarios que tratan de incluir en el parte daños ajenos al siniestro, generalmente materiales.
Durante el último año, destaca el incremento en las personas de en torno a 40 años que defraudan al seguro por las complicaciones económicas derivadas de la pandemia.
Los lunes y los martes son los días en los que mayor número de fraudes al seguro del automóviles se producen y los meses de mayo y junio destacan por encima del resto "posiblemente para obtener beneficios y poder disfrutar mejor de las vacaciones".
Por provincias, Cantabria encabeza el ranking de fraude de particulares en el seguro del coche, con un 9,4% de los partes, seguida por Cuenta (8,6%) y Málaga (7,6%), "todas ellas muy por encima de la media nacional, situada en el 6,3% de los partes". Las provincias en las que se ha registrado menos intentos de estafas al seguro en los dos últimos años son Soria (2,9%), Teruel (3%) y Palencia (3%).
Por otro lado, Línea Directa identificó 74 redes o mafias organizadas de fraude al seguro en 2020 y 111 en 2019, cifras inferiores a la registrada en 2018, de 123 grupos. Garre ha explicado que este menor número de mafias se debe al confinamiento que se realizó entre marzo y mayo en 2020, "por el colapso en la sanidad" y por el "miedo" de acudir a hospitales y urgencias, dificultando la organización de estas organizaciones.