La temporada de festivales y de grandes conciertos de verano está perdida. El Primavera Sound, Benicassim, Sónar o MadCool... en algunos de estos festivales llegan a juntarse más de 100.000 personas.
La incertidumbre reina en el sector del espectáculo que no sabe si dar por perdida la temporada o si esperar a que el Gobierno concrete las nuevas normas con las que podrán volver a celebrarse este tipo de eventos multitudinarios.
Reducción de aforo o cancelación
Para eventos multitudinarios de este tipo, vender el 80% de las entradas sólo sirve para cubrir gastos, pues las ganancias llegan por encima de esa cantidad aproximada. Una restricción de la mitad del aforo, por ejemplo, haría más rentable cancelar que seguir adelante, coinciden todas las fuentes consultadas.
A eso hay que añadir que existen muchas dudas sobre la respuesta del público, especialmente de los asistentes extranjeros, que llegan a suponer la mitad en citas como Primavera Sound o FIB.
Otros promotores y managers trabajan estos días en intentar recolocar en otoño los conciertos de ese mes.