Los peritos revisan ya los daños del edificio siniestrado en Pinar de Chamartín tras el grave incendio declarado en la mañana del domingo, que dejó tres pisos completamente calcinados, ocho viviendas en total.
Según ha podido confirmar Telemadrid con Bomberos y técnicos, si no hubo una tragedia mayor fue porque el edificio es de nueva construcción. Todo apunta a que la causa del incendio fue una barbacoa cuyo fuego se descontroló bien entrada la madrugada, casi al amanecer. Los asistentes se marcharon con el incendio iniciado y sin avisar a los vecinos. De hecho, incluso muchos residentes del edificio se enteraron del fuego por familiares que vieron las imágenes en televisión.
Además, el sistema de alarma no funcionó porque estaba desconectado. Al parecer, había saltado varias veces por error en el pasado y por ello se había apagado.
Los vecinos pueden habitar sus viviendas con normalidad entre la planta baja y la 15ª, mientras que en las plantas superiores los residentes han tenido que ser realojados porque incluso en los casos de las casas menos afectadas, no hay luz ni agua.
Aunque algunas partes de la fachada no tenían materiales ignífugos, lo que favoreció la propagación del fuego gracias al viento, afortunadamente el edificio sí tenía bloques compartimentados, de modo que los daños fueron limitados, a pesar de la aparatosidad del incendio.