De Cos pide un pacto de Estado para un programa de reformas y cree que "el ajuste es inevitable"
El Gobernador del Banco de España pide "consenso" y adelanta que "el reto que tenemos es de muchos años" y advierte "tendremos que remar con el agua en contra"
EUROPA PRESS
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha reclamado este lunes en el Congreso la necesidad de alcanzar un "acuerdo político" para "varias legislaturas" con el fin de impulsar un programa de "reformas estructurales" que permitan el saneamiento de las cuentas públicas, con una revisión del gasto y la mejora de los ingresos fiscales, considerando que "el ajuste (del gasto) es inevitable".
Durante su intervención ante la Comisión de Asuntos Económicos y Transformación Digital para dar cuenta de sus perspectivas económicas ante la crisis del coronavirus, Hernández de Cos ha llamado a poner en marcha esta estrategia una vez se haya superado la pandemia, si bien ha incidido en que "su diseño y comunicación no deberían dilatarse".
En este sentido, considera necesario evitar "una retirada prematura de las medidas fiscales de emergencia" --"aumentaría el riesgo de que el crecimiento económico sufriera daños más duraderos, ha dicho-- pero al tiempo ha reclamado un "anuncio temprano de una estrategia de reducción de los desequilibrios fiscales para su implementación gradual posterior", ha dicho.
Así, ha llamado a anticipar y definir un plan de reformas para reducir "los desequilibrios fiscales", pues considera que "una definición temprana de esta estrategia tendría importantes beneficios para la credibilidad" de la política económica de España "y permitiría potenciar los efectos expansivos de las actuaciones fiscales actuales".
"Si ganamos credibilidad, el peor punto de partida puede ser no tan relevante", ha aseverado Hernández de Cos, que considera "fundamental el consenso, ya que este "proceso de consolidación gradual" debe de ser "sostenido en el tiempo" y "lo normal es que haya alternancia" en el Gobierno. "El reto que tenemos es de muchos años", ha incidido, al tiempo que considera que este consenso "sería un elemento añadido para esa ganancia de credibilidad".
El gobernador del Banco de España ha advertido del "grado de incertidumbre inusualmente elevado" de esta crisis, ante las "numerosas incógnitas sin despejar" sobre la enfermedad y las consiguientes restricciones sobre la actividad económica, de modo que "cuanta mayor hibernación más daños sufrirá la actividad".
Para afrontar el saneamiento de las cuentas públicas, el gobernador ha asegurado que "se hace absolutamente necesario una revisión exhaustiva y rigurosa de todos los capítulos de gasto", con el fin de buscar dónde hay mayor "margen para una mejora de eficiencia" y reducir "gasto superfluo".
Interpelado por en qué medida es necesario recortar el gasto para poder reducir deuda pública, y si es posible reconducir la situación con una recuperación de crecimiento, Hernández de Cos ha señalado que este "ajuste estructural" es "necesario", pues no ve "prudente" elucubrar a supuestos determinados de crecimiento e intereses bajos en esta situación.
"El ajuste es inevitable", ha asumido, reconociendo eso sí, que "la magnitud (de esta crisis) es tan relevante que probablemente vaya a haber que tocar las dos patas, tanto el gasto público, eliminando gasto superfluo e ineficiencias, como modificar el sistema impositivo", ha manifestado.
Del lado de los ingresos, ha asumido que no será posible abordar esta reducción de desequilibrios con impuestos nuevos o "cambios mínimos" en los actuales. "La magnitud del reto es tan relevante que no podemos pensar que con cambios mínimos o con figuras impositivas nuevas vamos a ser capaces de afrontar el reto que tenemos por delante", ha dicho.
En este sentido, ha señalado que "es evidente cuáles son las figuras tributarias que tienen capacidad recaudatoria" y que, si bien "se pueden añadir otros elementos", ha dejado claro que "con capacidad recaudatoria suficiente hay cuatro (impuestos), básicamente". Asimismo, ha llamado a tener en cuenta "la eficiencia" en cualquier modificación que se lleve a cabo de estos impuestos, no sólo en el gasto, y de la "equidad", "un aspecto que hay que tener en cuenta" y en el que ha defendido poner "énfasis" porque "puede afectar negativamente al crecimiento.
Durante su intervención inicial, ha llamado a elevar como "prioridad" la mejora de la capacidad recaudatoria y su eficiencia, y ha citado como tarea pendiente la revisión de beneficios fiscales "para racionalizar su uso y mejorar su eficiencia", así como avanzar "de manera coordinada a escala internacional" hacia "algunas vías de reforma impositiva" sobre "algunas empresas multinacionales". Todo ello, "con el fin de evitar la utilización de estrategias agresivas de planificación tributaria para trasladar sus bases impositivas a aquellas jurisdicciones en las que la tributación es más reducida".
En todo caso, Hernández de Cos ha dejado claro que retomar una "dinámica de reducción de la deuda pública no es en absoluto imposible", si bien ha lamentado el "crecimiento potencial reducido" que presenta España "en comparación a otros países", algo que ha atribuido la ausencia de reformas, al bajo nivel de productividad y al elevado nivel de desempleo estructural.
Para ello, ha reclamado dirigir la atención al fomento de la inversión en I+D+i, la educación y las políticas activas de empleo, "una asignatura pendiente", así como a aplicar cambios en materia laboral, como una "revisión profunda del abanico de modalidades contractuales que tienda a equiparar el grado de protección" para "poner fin a una dualidad excesiva".
Durante su intervención ante la comisión parlamentaria, ha incidido en que "no hay una alternativa sensata a la expansión presupuestaria" en el corto plazo, pero que una vez se supere la pandemia, sanear las finanzas públicas "debe a pasar a primer plano para descartar episodios de deuda" como los vividos en la última crisis financiera.
En este sentido, ha lamentado el "muy reducido margen" con el que España ha llegado a esta crisis, con "una posición de partida de sus finanzas públicas vulnerable" por sus niveles de endeudamiento y de déficit, un factor que, ha apuntado "está condicionando las decisiones de la política económica" cuando la política presupuestaria es "el único instrumento para afrontar un 'shock asimétrico".
El gobernador ha lamentado cómo, en época de recuperación, "cuando el crecimiento era boyante", se ha "perdido una oportunidad para la reducción estructural del déficit". "Esto es una lección que tenemos que aprender. Nos deja menor margen para afrontar perturbaciones", ha dicho.
Hernández de Cos ha señalado el envejecimiento de la población el aumento de un ya elevado nivel de deuda, y el consecuente aumento de intereses como amenazas para afrontar la recuperación. "Tendremos que remar con el agua en contra", ha dicho, señalando además la necesidad de aumentar el gasto en áreas como Sanidad, y en factores para potenciar el crecimiento, como el I+D+i o la educación.
También ha destacado cómo este gasto público va a aumentar de forma estructural con políticas como la renta mínima o las contrarreformas en pensiones, al volver a la revalorización conforme al IPC y a la suspensión del factor de sostenibilidad.