Ni el frío ni la escasa lluvia han impedido que el centro de Madrid vuelva a llenarse este lunes festivo en la Comunidad. La Policía Municipal se ha visto obligada a cortar el acceso a la Puerta del Sol ante la gran afluencia de personas que se han acercado al centro aprovechando el puente.
Y todo ello a pesar de que los comerciantes y transeúntes en general han notado el descenso de visitantes respecto a otros años, hasta un 40% menos.
Un total de 150 agentes controlan en el corazón de Madrid que no se produzcan aglomeraciones durante la campaña de Navidad, especialmente en la calle del Carmen y Preciados.
La concentración de gente en este punto neurálgico de Madrid ha obligado a Metro a cerrar la estación de Sol para evitar las aglomeraciiones.