Cientos de personas hace fila frente al Centro de Internamiento de Extranjeros de Aluche en Madrid. Son, en su mayoría, venezolanos que tratan de inscribirse en el registro de extranjería que está en el interior del recinto.
Son familias con niños que intentan regularizar su situación y ser reconocidos como asilados políticos.
Muchos de ellos llevan durmiendo en la calle desde el lunes, haciendo cola para entrar. El problema es que diariamente sólo se dan 80 números para realizar gestiones.
Las personas que se agolpan en el exterior, entre las que hay personas de edad y niños, se quejan de la situación que padecen y muchos reconocen que "estan quemados, haciendo cola".