Las fuerzas de seguridad continúan investigando el incidente y mantienen la "mente abierta" sobre las motivaciones del atacante del Puente de Londres, que portaba un falso cinturón explosivo adosado al cuerpo.
Al menos dos personas han muerto, además del presunto terrorista, que fue abatido mortalmente por dos disparos de la Policía londinense.
Kirsten Jones viajaba con su bebé en autobús a la hora del incidente y fue una de los testigos que presenciaron más de cerca lo ocurrido, ya que incluso vislumbró el artefacto artificial que el presunto autor llevaba debajo del abrigo. "Por supuesto, en el autobús, estábamos todos en pánico”.
Al principio pensó que se trataba de una pelea, pero luego se dio cuenta de que era la Policía la que se enfrentaba a "un hombre alto y barbudo". Asegura que oyó "dos disparos o dos golpes fuertes y también vi una pistola de descarga eléctrica, y luego el chico yacía en el suelo", dijo, tras lo que los agentes advirtieron el chaleco y lo movieron "rápidamente hacia atrás, alejándolo".
Amanda Hunter también se encontraba en un autocar sobre el puente de Londres cuando la sorprendió el suceso. El autobús "se detuvo de repente y hubo conmoción. Miré por la ventana y vi a estos tres oficiales de policía sobre un hombre. Parecía que había algo en su mano, no estoy cien por cien segura, pero luego uno de los policías le disparó", señaló.