La presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata a presidir el PP de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha comprometido este sábado a recuperar "el bienestar aniquilado", "los años perdidos" y "la pujanza olvidada", reivindicando "vivir a la madrileña" en una comunidad "abierta", "tolerante", "mestiza" y que "no divide ni enfrenta" frente a los que "atentan" contra todo.
Arropada por simpatizantes, alcaldes y concejales del Este y Sureste de la región, la líder madrileña ha participado en un acto de campaña en Arganda del Rey con afiliados para presentar su candidatura al 17º Congreso Autonómico de los días 20 y 21 de mayo.
En su intervención, ha recalcado que el PP es el proyecto que "España se está perdiendo hasta que los buenos lleguen a las instituciones" y ha advertido de que el independentismo no romperá con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pese a la crisis del espionaje de Pegasus porque es "un negocio".
En primer lugar ha querido agradecer la confianza que le dieron hace un año los votantes del PP y ha reivindicado el triunfo del 4 de mayo que no fue "una anécdota", lo que ratifica que les gusta "el modo de vida" que se han dado en Madrid y que fue lo que pelearon esa fecha.
Tras señalar en tono irónico que "muy mal" se le tiene que dar para no ganar en el Congreso de Madrid, ha subrayado que las cosas fáciles nunca la han gustado porque "el camino correcto es el difícil". "Por eso no quiero darlo por ganado. Quiero todos los días hasta el 21 de mayo celebrar con los votantes, compañeros y simpatizantes un momento para hablar de la casa y pensar qué podemos hacer y cómo podemos mostrarnos y por qué somos el mejor proyecto político de España", ha subrayado.
"Vamos a renovar nuestras bases, vamos a avanzar y vamos a volver a vernos. Volvemos como el PP de Madrid con más fuerza que nunca y reivindicando todo lo que hemos hecho en la Comunidad de Madrid, que la hemos transformado y que hemos otorgado a nuestros ciudadanos los mejores servicios públicos", ha reseñado.
"VIVIR A LA MADRILEÑA"
La líder madrileña ha reivindicado el "vivir a la madrileña" al asegurar que en Madrid "no hay clasismo porque no se está pendiente de cuánto gana cada uno" y porque "no hay clases sociales en contra de lo que intenta vender la izquierda".
"En Madrid ganas con el respeto, la ilusión y los proyectos comunes. Nos han intentado vender que, por el origen y por el bolsillo, nos tenemos que enfrentar entre nosotros. Intentan provocar odios, colectivizar y llevar a la gente a las urnas a través de agravio", ha censurado.
"Nos intentar ofender con lo de tabernarios, borrachos, homófobos... En una terraza en la Comunidad de Madrid, desde luego en toda España pero aquí, no nos importa la clase social de la persona con la que te tomas algo. Nos importa como convivimos con respeto en Madrid, algo maravilloso. Y cuando digo que si somos callejeros, tabernarios, se lo toman con tanta mofa porque no conocen cómo vivimos en esta comunidad que no cierra", ha destacado.
Así, ha subrayado que el PP defiende una comunidad "abierta, tolerante, mestiza, que promueve el esfuerzo, el sacrificio, la pelea, la propiedad y la libertad", por lo que ha dicho que por eso, "atentan contra todo aquello".
"Creemos en la economía que puja por el incentivo y por ayudar a quien se queda atrás. Y son incapaces de entenderlo porque vuelven a necesitar esa división clasista que fabrican ellos. Nosotros no enfrentamos", ha reseñado afirmando que algunos presidentes autonómicos socialistas parecen "aduaneros" porque "parece que hay que pedirles el pasaporte" y "permiso para moverse por España".
"A mí me lo hacen, me lo han hecho en la campaña de Castilla y León y cuando hemos ido a otras autonomías especialmente a Asturias. Perdón por ir a moverme por España. Nos tratan como terruños, nos dividen", ha afeado.
CRITICA A LOS LIDERES DEL PSOE
Tras ello, ha recalcado que en Madrid hay una gran afición taurina y algunos líderes del PSOE "bien que callan porque les gusta ir a los burladeros", pero "luego dejan abandonada la fiesta". "Bien que van pero abandonan la fiesta y las tradiciones porque no tienen valor para decirles a sus líderes que se están equivocando", ha dicho.
La dirigente autonómica ha censurado que la izquierda vaya en contra de "una tradición española como la que más" y que quieran enfrentar a las tradiciones y a las tendencias".
"Qué la inmensa mayoría de nuestro vocabulario está impregnado por la tradición de la tauromaquia en nuestro país. Por qué el progreso y la envidia tienen que estar siempre rotos. Las personas tienen derecho a prosperar, tienen derecho a tener sus patrimonios y tienen derecho a aspirar a vivir cada vez mejor", ha dicho, añadiendo "bueno ya, digo ya un aplausillo", siendo aplaudida por los asistentes al acto de campaña.
No quiere "eliminar" a la izquierda
Ayuso ha insistido en que no quiere eliminar a la izquierda sino ganarla y convencer a sus votantes de que tienen razón porque "el socialismo no funciona". "Queremos convencer desde el punto de vista liberal que lo nuestro es lo que triunfa y lo que une. Son totalitarios. Llamamos a las urnas y triunfó el mensaje de la libertad. No queremos imponer sino convencer del lado correcto", ha apostillado.
A continuación, ha hecho hincapié en que se está destrozando la imagen de todas las instituciones, siendo la última el Centro Nacional de Inteligencia en relación a los espionajes con el software Pegasus.
Al respecto, la dirigente popular ha señalado que el independestismo es "un negocio", por lo que ha advertido de que el presidente del Gobierno no romperá con sus socios. "Habláis lo que os da la gana a espaldas de todos, cuando os da la gana, que sois lo más oculto que hay", ha señalado en relación a Sánchez y Aragonés.
"No vais a romper porque tenéis un negocio. ¿Qué le vais a dar ahora al independentismo? Más dinero de todos los españoles y más independencia. Y la corruptela sigue, sigue la corruptela. No va a cambiar nada", ha dicho.
Por ello, ha incidido en que "las consecuencias" de esa imagen no son para el Partido Popular, sino no son para el resto de los partidos políticos que sí creen en la Constitución Española y en el abrazo que se dieron en el 78. "Las consecuencias son para los ciudadanos y para la marca España", ha avisado.