El Papa Francisco cumple hoy 87 años. Durante el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro, el papa ha sido felicitado por un grupo de niños, que han desplegado una pancarta en la que han escrito "feliz cumpleaños".
En vísperas de su onomástica, el Papa ha asegurado en una entrevista que no tiene previsto dejar el pontificado, al menos de momento, y que no quiere ser enterrado en la Basílica de San Pedro, como la mayoría de sus antecesores.
El Papa quiere ser enterrado en la basílica de Santa María La Mayor, donde ya hay otros dos papas enterrados, Clemente VIII y Pablo V, con unas exequias lo más sencillas posibles. Desde su proclamación, el 13 de marzo de 2013, el Papa, que se refiere asimismo como “padre Jorge”, ha tenido pequeños detalles que le distinguen de sus predecesores. No cambió su cruz pectoral y usa el mismo anillo episcopal desde 1994. Renunció a todos los componentes rojos del hábito tradicional, muceta, zapatos y estola, como sí hacía Benedicto XVI, y prefiere vestir todo de blanco. Aunque cuando le pidieron usar pantalones blancos como papa dijo: “no soy un heladero”. No reside en El Vaticano, sino en la Casa de Santa Marta, el hotel de El Vaticano desde 1996, donde hace una vida muy frugal, que en poco se distingue de la del resto de los huéspedes, clérigos y los cardenales en época de conclave. Se levanta a las cinco menos cuarto de la mañana, se viste y afeita solo, desayuna en el comedor con los alojados en la casa, por una promesa a la Virgen del Carmen en 1990, y salvo excepciones, no ve la televisión. No usa internet. Y es muy aficionado al fútbol, forofo del Club Atlético San Lorenzo de Almagro.
