La Organización Mundial de la Salud advierte sobre un "alarmante aumento" de casos de sarampión en Europa. Señalan más de 30.000 notificaciones entre enero y octubre, 30 veces más que en 2022. Los expertos aseguran que se debe a la baja vacunación
La razón es muy simple. Muchos niños no son vacunados de la primera dosis, y menos de la segunda. Y es una enfermedad muy fácil de prevenir gracias a la vacuna, introducida ya hace 60 años. Consecuencia: la enfermedad ha resurgido con fuerza, con dos niños fallecidos en Rumanía y docenas hospitalizados en Reino Unido.
Las autoridades han confinado a los pequeños en casa si no han sido vacunados, y han tenido contacto con algún enfermo. En Austria se han revelado unos 200 casos.
El virus del sarampión es uno de los más contagiosos que existen, lo que obliga a mantener las coberturas vacunales siempre por encima del 95% para evitar su circulación. Puede provocar cuadros muy graves e incluso la muerte de uno de cada mil niños infectados.
España, por ahora, está libre del virus. En 2017, la OMS declaró a nuestro país libre de su transmisión endémica. El último brote se produjo en 2019, afectó a Madrid, Barcelona y Guadalajara, y fue leve.
Más de la mitad de los 22 millones de niños que en 2022 no había sido vacunados vivían en el Sur global, en países como Angola, Filipinas o Nigeria.
En el Congo, el año pasado se registraron más de 700 casos, y 13 muertos.