Las llamas siguen fuera de control en Galicia. En Arbo y A cañiza, el viento es el gran problema para contener el avance de las llamas.
La zona de Vigo permanece alerta con tres incendios que no invitan al optimismo. El de Pontearas ya ha sido estabilizado pero el de Arbo, sigue avanzando tras arrasar 300 hectáreas de monte y el de A Cañiza también sigue sin control. El viento está siendo el gran problema. Eso sí ya se ha reabierto la autovía A-52.
La comunidad con más incendios activos
Galicia despide julio pendiente de los incendios forestales y de los termómetros, ante el aumento generalizado de las temperaturas, tanto diurnas como nocturnas, que al menos hasta el martes afectarán a las provincias de Ourense y Pontevedra.
Este calor extremo no favorece además la situación de los incendios en Galicia, que continúan una jornada más afectando, precisamente, a las zonas en alerta naranja, las de las provincias de Pontevedra y Ourense.
El incendio declarado en Mourentán, en Arbo (Pontevedra) continúa activo y ha calcinado ya unas 350 hectáreas, según los datos recabados por la Xunta hasta las 13:30 horas de la tarde de este domingo.Allí ha sido decretada la situación dos, una medida preventiva por la proximidad de las llamas al núcleo habitado de As Searas.
En la misma provincia, en A Cañiza, en el lugar de Oroso, también permanece activo un incendio que afecta a 25 hectáreas y ante el cual, por precaución, se decretó también la situación dos, debido a su cercanía al polígono industrial del municipio.
Además, en Padróns, en Ponteareas se ha dado por estabilizado a las 10:14 horas de esta mañana el incendio que se originó en la pasada noche del sábado y que ha calcinado alrededor de veinte hectáreas.Ya en la provincia de Ourense, según el balance facilitado por el Gobierno gallego, está controlado el incendio de Castrelo de Miño, con 200 hectáreas devastadas.