En el País Vasco se investigan una docena de pinchazos a mujeres registrados en los recintos festivos y espacios de ocio de la región. En todos los casos la víctima nota la punción, principalmente en el brazo o la pierna, y comienza sentirse indispuesta. Aunque, de momento, en ninguno de ellos se han encontrado restos de sustancias tóxicas.
En Cataluña también se están dando nuevos casos con el método de la sumisión química, que ya ascienden a 17. La mayoría de denuncias se han producido en Lloret de Mar, Gerona, y Barcelona.
La última víctima se encontraba en un local de ocio nocturno en la madrugada del pasado miércoles 27 en la ciudad condal catalana. En ninguno de los casos denunciados, la chica sufrió una agresión sexual o robo. Ahora, los investigadores están recogiendo las grabaciones de las cámaras para hallar indicios.
El origen de este nuevo método se relaciona con el ámbito de las fiestas ilegales. “Estos casos de sumisión química provienen del ámbito ilegal. De cuando las discotecas estaban haciendo botellones y fiestas ilegales donde era fácil de someter químicamente a alguien cuando no había ninguna medida de seguridad” ha asegurado Joaquín Boadas, secretario general de Spain Nightlife.