Una pancarta de 'No a los abandonos, no al tráfico ilegal, no a la Ley de Bienestar Animal' durante una protesta este domingo contra la Ley del Bienestar Animal en Sol
Representantes relacionados con el sector animal, comercios especializados y tiendas tradicionales de venta de mascotas, protestan hoy contra la Ley de bienestar animal que quiere sacar adelante el Gobierno.
Unas cinco mil personas, según estiman los organizadores de la manifestación -comercios especializados y las tiendas tradicionales de venta de animales- han recorrido el centro de la capital para reivindicar "una ley de bienestar animal, pero no una que pretenda prohibir todos los animales exóticos", ha asegurado a los medios el portavoz de la Federación Fauna y veterinario Antonio Folch.
Esta nueva ley pretende proteger a los animales domésticos, de las altas cifras de abandono y del maltrato animal y de proteger la salud pública ya que se estima que hay más de seis millones de animales sin identificar legalmente, lo que supone un riesgo.
Folch ha criticado la falta de consenso con que a su juicio ha contado el proyecto legislativo, que ha calificado de "aberración" desde un punto de vista económico y también desde el punto de vista del bienestar animal.
El veterinario ha advertido de que la prohibición que se aplicaría a los animales exóticos una vez entre en vigor la ley puede traducirse en una falta de protección para esos individuos, que serían entregados a protectoras o centros de recuperación incapaces de asumir tal volumen de animales.
El especialista ha recordado que "cuando la tenencia de la tortuga mora y la tortuga mediterránea pasó de ser falta a ser considerada delito, la gente se asustó y empezó a llevar a sus tortugas a un centro de recuperación", lo que derivó en que "en un solo centro de recuperación de Almería murieron 3.600 tortugas, tortugas que vivían perfectamente sanas en sus respectivos hogares".
Desde la Federación Fauna se suman además a las críticas sobre el cierre de establecimientos de tiendas de animales, centros veterinarios especializados en animales exóticos y otros negocios que anticipan como inevitable el resultado de la ley, que la semana próxima llegará a su tramitación final en el Congreso de los Diputados.
"Es una ley que no ha pensado las consecuencias", ha aseverado a la prensa Luis Olmedo, miembro de la junta de esta entidad, que estima que la prohibición de la venta de animales en tienda y de la tenencia de animales exóticos que contempla el proyecto legislativo acabará con "más de 200.000 puestos de trabajo entre directos e indirectos" y con "más de 6.000 negocios en toda España".
La ley, de salir adelante, les impedirá vender perros, gatos, conejos o hurones.
Asimismo, Olmedo ha afeado que, por estar en contra de la ley -que en la protesta calificaban como "animalista"- se les coloque la etiqueta de "maltratadores" pues, ha recalcado, "somos los que más sabemos de animales, los que más cuidamos de ellos, y vivimos con ellos las 24 horas del día".