El Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón comienza este lunes las obras necesarias para garantizar la seguridad del edificio afectado por la explosión de un local de comida china el pasado 12 de agosto.
Los trabajos, que se desarrollan en el número 8 de la calle Benigno Granizo, tienen como objetivo garantizar la seguridad de los vecinos y restablecer la normalidad en la zona, han explicado a Efe fuentes municipales.
La duración de estos trabajos, que ya cuentan con los permisos preceptivos de la Comunidad de Madrid, dependerá del estado de la estructura del edificio.
Previamente al inicio de las obras, el Consistorio pozuelero ha realizado una serie de labores necesarias para el derribo, tales como el control técnico y la protección de los edificios colindantes, así como la comunicación a los vecinos.
Las familias de los dos inmuebles aledaños cuentan con la ayuda de los servicios sociales municipales, que atienden todas sus necesidades.
Esta nueva medida se suma a otras que el Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón ya tiene en marcha desde el momento de la explosión como son el corte al tráfico de la calle afectada, la vigilancia policial constante en la zona, y la atención a las familias damnificadas por parte de los servicios municipales.