La finca de Quintos de Mora es muy apreciada por su discrección. José María Aznar la colocó en su agenda política hace 17 años.
La finca de Quintos de Mora pertenece al Estado desde hace décadas pero fue durante el mandato de José María Aznar cuando comenzó a utilizarse como lugar de relevancia política. Allí se reunión con Bush o Tony Blair, por ejemplo. Zapatero también la utilizó en alguna ocasión para reuniones de Estado.
2001 fue el año que popularizó en las televisiones el nombre de una finca toledana: Quintos de Mora.
Bush hijo visitaba España y aprovechaba para encontrarse allí con el entonces presidente y amigo, José María Aznar.
En esa época Tony Blair, Jacques Chirac o Benjamin Netanyahu también acudieron a este parque nacional de 6.000 hectáreas.
En Quintos de Mora se reunieron Aznar y Rajoy el mismo día en que éste fue designado sucesor.
Su efecto talismán también fue aprovechado con menos frecuencia durante la presidente de Rodríguez Zapatero. Allí recibió al entonces presidente brasileño Lula da Silva.
Paz, aislamiento y bosque mediterráneo. Es el discreto encanto de este enclave de los Montes de Toledo, cuyo eco preserva el secreto de reuniones decisivas.