Llegan los campamentos de verano, pero ninguno como éste. Está organizado por los mayores para cuidar de sus nietos. Una forma lúdica y amena de conectar a las nuevas generaciones con los hábitos y experiencia de los veteranos.
Goyo es un abuelo canguro. Cuida de sus nietos en verano y se quiere apuntar a este novedoso campamento pensando precisamente en ellos: abuelos y nietos. Jesús es otro de los abuelos ya apuntados.
La asociación de mayores de Fuenlabrada retoma este verano una actividad interrumpida durante la pandemia: un campamento urbano que permite a los mayores ofrecer entretenimiento y a los niños combinar la familia y el juego.
Goyo y Jesús son un ejemplo, ellos también confirman una segunda familia, la de los veteranos solidarios y comprometidos: quizá la enseñanza más valiosa del campamento.