Todo preparado en el centro de Madrid para que no se repitan las imágenes de estos días. Vallas y despliegue policial, pero la tarde de domingo se desarrolla muy tranquila.
Un ambiente de calma y durante toda la tarde en Preciados o el Carmen se han convertido en calles de sentido único para evitar aglomeraciones.
No han tenido esta vez que cortar los accesos a la Puerta del Sol.
“Si todos llevamos mascarilla no hay problemas, luego las fiestas es otra cosa” lamenta una de las madrileñas consultadas. “No parece que haya demasiada gente”.
“Hay mucho control por parte de la policía” nos cuenta otra vecina.
Terrazas llenas en Olavide
La Puerta del Sol y la plaza de Olavide son otros espacios urbanos muy concurrido por las terrazas, completas en una agradable tarde noche de domingo.
“Gracias a que nos están dejando abrir a pesar de la pandemia, las terrazas estamos funcionando porque la gente quiere aire libre” nos cuenta Nina.
“El cierre perimetral nos ha venido bien a los que estamos en Madrid. Llevamos 30 años aquí y 18 en paseo de Acacias”.
Apurando hasta el toque de queda con terrazas llenas y un negocio redondo para la hostelería.