Instituciones Penitenciarias ha cifrado hoy de nuevo en un 65 % el seguimiento de la huelga que mantienen desde ayer los funcionarios de prisiones, que han vuelto a bloquear con piquetes las entradas a varias cárceles en su protesta para reivindicar mejores condiciones salariales y laborales.
Tras protagonizar dos jornadas de paro en octubre, los sindicatos CSIF, Acaip, CC.OO., UGT y CIGA decidieron retomar las movilizaciones con cuatro días más de huelga -de ayer sábado al próximo martes- para presionar al Ministerio del Interior.
Instituciones Penitenciarias estima hoy que el seguimiento es similar al de ayer, en torno al 65 %, mientras que CSIF lo eleva a más del 90 % y Acaip asegura que sólo se han cubierto los servicios mínimos, según apuntan a Efe fuentes de ambos sindicatos.
Según fuentes de Instituciones Penitenciarias, un autobús de trabajadores ha sido apedreado por los piquetes en Navalcarnero (Madrid) y los bloqueos han vuelto a provocar retrasos en los cambios de turnos, con Andalucía y la Madrid como las comunidades más afectadas.
El sindicato Acaip ha presentado una denuncia contra el director de la prisión provincial de Huelva, Alejandro Zulueta, acusándolo de agredir ayer a un funcionario que se manifestaba ante la cárcel, pero desde Instituciones Penitenciarias se desmiente "rotundamente" que hubiera tal agresión.
Los funcionarios han vuelto a manifestarse delante de las prisiones en distintos puntos del país con pancartas reclamando "un trabajo digno" y un "salario justo" y lemas como "prisiones sin agresiones" o "prisiones exige negociación".
Los sindicatos no reseñan incidentes graves, aunque las fuerzas de seguridad han intervenido para desbloquear los accesos a algunos centros penitenciarios y CCOO ha informado a través de Twitter de que una integrante de un piquete informativo en Alcalá Meco (Madrid) ha tenido que ser trasladada en una ambulancia "por pérdida de conocimiento por asfixia".
Las organizaciones sindicales de prisiones denuncian que han sido "engañados" por el Ministerio de Interior, que les prometió una subida salarial que luego retiro.