Ángel ha construido una piscina para poder hacer sesiones fotográficas submarinas
REDACCIÓN
Muchas veces nos hemos preguntado cómo se logran las imágenes bajo el agua tan nítidas. O cómo podemos ver de forma tan perfecta los movimientos de las nadadoras de la modalidad sincronizada... ¿Será que un fotógrafo tiene que meterse en el agua con ellas? ¿Se tratará de un buzo especializado en fotografía? Frío, frío... La realidad es que la piscina cuenta con una pared transparente.
¿Imaginas tenerlo en tu propia casa? El sueño de todo fotógrafo hecho realidad. Es la piscina que tiene Ángel en su chalet de Soto del Real.
Una piscina 'con vistas'
Las sesiones de fotografías submarinas tienen su encanto. La ingravidez que juega con el pelo, esas burbujas de oxígeno que rodean como en un cuadro mágico a la persona que se sumerge... Y para un fotógrafo supone todo un reto.
Ángel Álvarez, fotógrafo profesional desde hace más de veinte años, ha creado de su hogar su lugar de trabajo ideal. Por eso diseñó a medida un chalet pensado para aprovechar al máximo la luz y los puntos de fuga.
Pero eso no es todo... la casa debía contar además con una piscina 'muy especial'. Una de sus paredes incluye una amplia ventana con un cristal de doble hoja comunicado con la pared del sótano de la vivienda. De esta forma, desde ahí puede realizar maravillosas sesiones de fotografía submarina.
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"La ventana de la piscina tiene dos cristales de dos centímetros y medio cada uno, con unos butirales en medio, que es precisamente lo que le da elasticidad, porque el cristal en realidad está abombado. Y esto es lo que aguanta. En total, tiene unos cinco centímetros de grosor". Un cristal de cinco centímetros de grosor para aguantar el peso de 74.000 litros de agua.
En esta piscina de Soto del Real, Ángel ha hecho un buen número de sesiones fotográficas y videoclips musicales. También la alquila para grabar cursos de submarinismo y para el rodaje de alguna escena de películas.