La natación es un deporte que beneficia al cuerpo de manera global porque potencia la flexibilidad, la fuerza y la resistencia y además ayuda a la quema de grasa.
Este deporte es recomendado ya que al hacerse dentro del agua supone un trabajo muscular más intenso del que hacemos fuera del agua, fortalece la musculatura de todo el cuerpo, y no supone una sobrecarga brusca para articulaciones o tendones.
Por ello, se aconseja para la recuperación de lesiones o cirugías de miembro inferior.