Gema Hassen-Bey se ha convertido en la primera atleta en llegar a la cima del monte Abantos (1.753 metros) en silla de ruedas. Los brazos de la esgrimista paralímpica completaron en la noche del miércoles el desafío, tras una ascensión de 13 km. sobre "hand-bike" durante casi 12 horas.
La deportista, que se encuentra en plena preparación para ascender al techo de África, el Kilimanjaro (Tanzania), sufrió una accidente de automóvil cuando sólo tenía 4 años. "Llevo en crisis toda la vida", dijo irónicamente, y aprovechó la consecución de este reto para denunciar desde la cumbre que las personas en su situación tienen cada día por delante "un pequeño Kilimanjaro".
La gran apuesta de Hassen-Bey tiene como principal dificultad la propia orografía del terreno, puesto que la subida al monte africano presenta principalmente tres hábitats: bosque tropical de la base, pendiente de roca y gravilla volcánica en la parte intermedia y hasta la cima coronada con nieve. A ello se une la complicación de la altitud, puesto que el pico africano se encuentra a 6.000 metros de altitud, donde escasea el volumen de oxígeno.
Entre los próximos entrenamientos de la deportista se encuentra la adaptación a la altitud con cámaras hipobáricas y la subida a la Bola del Mundo.