La periodista zaragozana Eva Orúe será la nueva directora de la Feria del Libro, la primera mujer que desempeña ese cargo en 80 años de historia, y del que tomará posesión en enero, con el que pretende que este evento tenga "más personalidad", que dé a Madrid "más de lo que ya se le da" y que se muestre como un "potente espejo" de la sociedad española.
Así lo ha explicado Orúe (Zaragoza, 1962), una periodista que lleva "años" en el mundo editorial y tiene "cierta capacidad diplomática", unas características que son las que cree que han valido para que su candidatura a la dirección de la Feria del Libro haya resultado finalista.
"Desde mi profesión como periodista y directora de una agencia de comunicación soy asidua a la Feria del Libro desde hace bastantes años y leí que el Gremio de Libreros abría el proceso de búsqueda para la dirección. En un primer momento no pensé en ello, pero luego un par de amigos me dijeron que reunía las características. Ser directora de la feria es el sueño de cualquiera que se mueva en este sector", ha explicado.
Según sus palabras, uno de los objetivos es abrir la feria a "gente que hasta ahora no la considera suya, como la gente joven o los que llevan menos tiempo en Madrid", así como hay que "intentar" que se considere un "espacio de reflexión".
"Cuando la gente lee busca un espejo en el que mirarse, y la feria tiene que ser eso en cierto sentido. Tiene que mostrarse como un potente espejo de la sociedad española (...) la cuestión es que la feria tenga más personalidad y que podamos dar a la ciudad de Madrid más de lo que ya se le da", ha puntualizado esta mujer que sustituirá a Manuel Gil, quien ha estado al frente de esta cita con el libro durante los últimos cinco años.
Con el convencimiento de que la feria es "un acontecimiento social y económico consolidado" para libreros, editores y lectores, algo que hay que "preservar", Orúe ha dicho también que necesita "más proyección": "hay que avanzar por el camino de la diversidad, de la sostenibilidad, y hay que convertirlo en algo más que un acontecimiento de dos semanas y media".
"No sé si se puede decir que tenga presencia todo el año, pero que trascienda a esos días, preservando los sustancial, que es que libreros y editores van a vender y autores y lectores van a encontrarse. Hay que ver cómo conseguir aumentar la ambición cultural de la feria y cómo hacer que esa ambición repercuta en el objetivo final, que es vender libros", ha añadido.
Además, la periodista ha reconocido que el mercado latinoamericano "tiene que estar" en todo lo que haga en mercado editorial español y toma como referente, aunque salvando las diferencias entre ambas ferias, a la cita del sector editorial en Guadalajara (México).