El Museo del Prado celebra el décimo aniversario de su ampliación

  • El Museo, que ha doblado la cifra de visitantes, lo conmemora con un libro y una exposición fotográfica
  • La pinacotaca tiene prevista la rehabilitación del Salón de Reinos a cargo de Norman Foster

Más allá de los cuadros que dan categoría a sus paredes, el Museo del Prado es una obra de arte en sí misma. Se cumplen diez años de la ampliación más importante de la pinacoteca.

Rafael Moneo fue el artífice con un edificio junto al claustro restaurado de los Jerónimos. Un cumpleaños que celebran, cómo no, con una exposición que lleva por título "Esquinas, sombras, ángulos"

El Museo del Prado celebra el décimo aniversario de su ampliación. La fecha se conmemora con un libro y una exposición fotográfica en el claustro de los Jerónimos, con la que se ilustra el trabajo del arquitecto Rafael Moneo.

Si aún quedan escépticos, las cifras los desmienten. Invertir en cultura es rentable. Diez años después de la mayor ampliación, el museo casi ha doblado la cifra de visitantes, han aumentado las exposiciones y las actividades educativas. Y además de pintura y escultura, la visita ofrece arquitectura.

Con su habitual humildad, el autor de la ampliación no celebra su expresión personal como arquitecto sino que los visitantes hayan tomado con naturalidad este diálogo entre el Juan de Villanueva del siglo 18 y el Moneo del 21. Preguntamos al autor de la exposición, ¿en qué rincón de la ampliación debemos fijarnos? A su juicio en la Sala de las Musas.

REHABILITACIÓN DEL SALÓN DE REINOS

En el horizonte, más obras. La rehabilitación del Salón de Reinos a cargo de Norman Foster. Los Reyes eméritos inauguraron hoy hace una década la mayor ampliación en los 200 años de historia del Prado, que firmó el arquitecto Rafael Moneo y permitió al museo "pasar del siglo XIX al XXI", según sus responsables, que hoy miran al futuro con la rehabilitación prevista en su Salón de Reinos.

El director del Prado, Miguel Falomir, ha recordado en un acto en el que ha participado también Moneo, que el futuro de ese proyecto, que comandan los arquitectos Norman Foster y Carlos Rubio, está sujeto a su dotación en los Presupuestos Generales del Estado. "Lo importante es el compromiso para que la obra llegue a buen término. Si no se aprueban los Presupuestos ya el año que viene iríamos con retraso. No mucho, porque estaba previsto más o menos empezar en octubre de 2018, pero ya iríamos con retraso", ha apuntado Falomir.

"Esto son ampliaciones que en el fondo, no nos engañemos, son decisiones políticas que trascienden lo que es el presupuesto coyuntural de un ministerio en una partida anual", ha recalcado. La pinacoteca, ha añadido, ya está trabajando en esa rehabilitación del Salón de Reinos, pero las obras que se están haciendo "corren a cargo" ahora del presupuesto ordinario del Museo del Prado.

Moneo (Tudela, Navarra, 1937) ha indicado que la ampliación que él firmó, y que unió el Prado, subterráneamente, con los Jerónimos, es un proyecto "muy importante" en su carrera y ha destacado que no habrá "ningún problema de convivencia" con las futuras obras que harán Foster y Rubio en el Salón de Reinos. "Creo que es muy hermoso ver que el Prado tiene una historia, que el Salón de Reinos era un lugar que tuvo importancia en el Palacio del Buen Retiro, hasta ser el espacio de mayor valor", ha dicho.

El arquitecto, Premio Nacional de España de Arquitectura 2015 y Pritzker 1996, ha destacado que, independientemente del uso que se le de a la rehabilitación encargada a Foster, "será grato" que el público, en su visita a la pinacoteca, "se incorporen más" a la ciudad y "respiren aire libre".

El Prado celebra el décimo aniversario de su mayor ampliación con una publicación conmemorativa, "Museo Nacional del Prado. Rafael Moneo, 2007-2017", que incluye un estudio de Jorge Fernández-Santos, un ensayo fotográfico de Joaquín Bérchez y un balance de lo que ha supuesto para la modernización de la institución. "Me atrevería a decir que esta ampliación ha sido de alguna manera el vehículo que ha permitido al Prado pasar del siglo XIX al siglo XXI", ha dicho Falomir.