El 59,12% de las pymes asegura que sus ventas “no remontan” por la inflación acumulada y los crecientes costes laborales e impositivos, así como por el debilitamiento del consumo en el tramo final de 2022 y comienzos de 2023.
Esta es una de las conclusiones del barómetro ‘#LaPymeHabla’ de julio de Cepyme, que denuncia que la recuperación del tejido empresarial ha sido “desigual” e “incompleta”.
Todo ello, en un contexto en el que tres de cada cuatro empresas pequeñas y medianas aseveran que han evitado trasladar “completamente” el incremento que padecen en sus costes a los precios finales. En concreto, según la patronal, el 36% ha mantenido sus precios pese a la escalada de costes y el 41% los ha aumentado menos que la inflación. Incluso en un 2% de los casos se ha procedido a rebajarlos.
Este esfuerzo de las pymes, sin embargo, ha causado que sus ventas caigan en el 27% de los casos, mientras que quedan congeladas en el 32,08% de las empresas. Estas cifras, junto al incremento de costes, ha impactado también en los márgenes empresariales.
De hecho, al mismo tiempo que el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital está promoviendo un Observatorio de Márgenes Empresariales, Cepyme destaca que el 60% de las pymes encuestadas lamentan que sus márgenes empresariales se han visto “estrechados” y, como consecuencia de ello, el 13,1% duda ya de su viabilidad.
En este contexto, el barómetro refleja que las principales preocupaciones de las empresas tienen que ver con los costes de todo tipo, desde los energéticos hasta los laborales, pasando también por los financieros, impositivos y burocráticos.
Ante esta situación, el 80% de las empresas encuestadas suspende la política económica del actual Gobierno por no considerarla “adecuada” a la coyuntura y el 93% confía “poco o nada” en que los fondos europeos -percibidos por las pymes como “prácticamente inaccesibles” puedan fortalecer la recuperación económica.
Por ello, Cepyme alertó del aumento continuado de los costes, “ya que la inflación se sitúa en niveles aún elevados este año”, y subrayó que la factura energética se ha duplicado en el último año, “lo que encarece de forma considerable a las compañías sus gastos de producción”.
Asimismo, pidió contener la factura fiscal que soportan las empresas y, “en especial”, el incremento de las cotizaciones sociales, desistiendo así “de cualquier iniciativa para elevar la presión fiscal empresarial”. “Los sobrecostes que afrontan las pymes españolas minan su capacidad de ganar tamaño, así como su competitividad en el mercado nacional y exterior”, apostillaron desde la patronal.