La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, anunció hoy la apertura inminente en la capital francesa de un "campamento humanitario" para refugiados ajustado a las normas de la ONU, con el que se intenta afrontar la actual crisis migratoria."Es hora de pasar a la velocidad superior y aportar respuestas", indicó la alcaldesa en conferencia de prensa, donde avanzó que el Ayuntamiento está examinando las formas de abrir ese campamento "lo antes posible", aunque su deseo es que esté operativo para dentro de un mes y medio.
La representante parisina subrayó la necesidad de acoger a ese colectivo "dignamente" y su voluntad de que haya "un lugar identificado" para poder redirigir a esas personas "hacia el circuito que corresponda".
La capital francesa está analizando "distintos sitios para ver en qué plazos, lo antes posible", se puede poner a disposición del Estado el centro, que Hidalgo espera se integre en su proyecto.
Este centro respetará las "condiciones reglamentarias" dictadas por la ONU y por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, lo que significa alojamientos modulares "que puedan instalarse rápidamente" pero que cuenten con "todo el confort necesario", precisó.
Se inspirará, agregó la alcaldesa parisina, en el campamento de Grande-Synthe, construido el pasado marzo por la organización Médicos Sin Fronteras a las afueras de la ciudad de Dunkerque, junto a la frontera belga, para reemplazar a un insalubre poblado situado a pocos kilómetros y en el que pernocta en torno a un millar de iraquíes, iraníes, turcos o sirios, entre otras nacionalidades.
Los responsables de ese centro y miembros del Gobierno francés firmaron hoy una convención en virtud de la cual el Estado aportará 3,9 millones de euros de financiación para su gestión.
El Estado acompañará la gestión del centro al menos hasta el 31 de marzo de 2017.