El consejero madrileño de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Borja Sarasola, ha manifestado que "Madrid vive una revolución en la cocina gracias a dos cosas: a que Madrid tiene los mejores cocineros de Europa, como David Muñoz con las tres estrellas michelín, y a la calidad de los productos de la región".
Así lo ha manifestado Sarasola en la clausura del curso de verano 'Huerta y gastronomía de Madrid: de la Ilustración al siglo XXI', impartido durante tres días por la escuela internacional de cocina Le Cordon Bleu en la Universidad Francisco de Vitoria, ubicada en Pozuelo.
A lo largo de estas jornadas, los mejores chefs de la región y del país, como Mario Sandoval o Fernando del Cerro, técnicos del Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Agroalimentario (Imidra) y periodistas especializados han abordado el papel de la huerta madrileña en la cocina y la innovación culinaria, la vinculación entre huerta y gastronomía, su importancia sociocultural y las proyecciones de futuro.
Esta iniciativa, que se incluye en el proyecto 'Madrid Jardín Gourmet', que continuará con un Festival gastronómico, ha combinado clases teóricas, prácticas en los fogones, salidas para conocer 'in situ' la huerta de la Comunidad, catas, mesas redondas o exposiciones.
"Unir investigación, unir cocina y unir alimentos de Madrid es un enorme acierto", ha resaltado el responsable regional. Además, el consejero ha destacado que "la alianza entre la tierra y la mesa marca el camino para poner en valor los productos de calidad de la Comunidad de Madrid".
"Exportamos el 47% de lo que producimos en Madrid, porque quienes están fuera consideran que el sello de nuestros productos es de extraordinaria calidad, generando 1.343 millones de euros en sólo la producción agrícola", ha añadido. De la misma manera, ha explicado la importancia de la gastronomía en el turismo, ya que es el segundo factor en el que "más dinero se gastan" las 400.000 personas que eligen visitar Madrid.
Durante el curso se ha puesto de manifiesto el papel principal de la huerta madrileña en los platos de los grandes cocineros "gracias a la recuperación de variedades tradicionales y a los proyectos de innovación gastronómica desarrollados por el Gobierno regional".
En ese sentido, la labor investigadora del Imidra, que en los últimos años ha recuperado casi 190 variedades hortofrutícolas tradicionales y autóctonas, ha sido esencial para desarrollar la huerta madrileña. De hecho, en el mes de mayo entregó 44.000 plantas de variedades autóctonas de verdura y fruta a productores locales con el objetivo de "facilitar a los agricultores un producto de calidad".
El año pasado la Comunidad produjo cerca de 30.000 toneladas de hortalizas, lo que representa un 14 % más que en 2012, siendo el tomate la más consumida y el ajo, el repollo o el melón las que tuvieron mayor peso en el sector hortofrutícola madrileño.