El consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Enrique López, ha pedido este lunes que el Gobierno "recapacite" y "aborte" la reforma de la ley de seguridad ciudadana porque "va en la línea contraria" de la "seguridad".
Así lo ha expresado López durante la presentación de unos protocolos del Plan de Prevención del riesgo del consumo de drogas y de lucha contra las bandas juveniles en los centros docentes.
El consejero ha reclamado el apoyo y el esfuerzo del Gobierno para que dote de más recursos e inteligencia policial para hacer frente a las bandas juveniles, y también que "aborte" la reforma de esta ley aprobada por el PP en 2015, también conocida como 'ley mordaza'.
López ha señalado que Madrid necesita más policías y guardias civiles que tengan "instrumentos" y no estén "temerosos" de aplicar la ley porque, si lo están, los "estaremos maniatando" y haremos "más vulnerables a los vulnerables y más fuertes a los delincuentes", ha manifestado.
Ha exigido que se mantengan los "elementos esenciales" de la ley, y que el Gobierno no acceda a las "peticiones de su socio Unidas Podemos" que pretenden "eliminar elementos e instrumentos necesarios para que nuestras policías puedan trabajar con mayor seguridad".
En concreto, ha llamado a mejorar la investigación en inteligencia ante esta delincuencia juvenil para detener "lo antes posible a los cabecillas", y también ha abogado por abrir un debate sobre el control de las armas blancas de gran tamaño.
"Hace falta estudiar una nueva regulación que determine un mayor control de la compraventa de armas blancas de gran tamaño", ha indicado López, que ha añadido que es "esencial" controlar este comercio a través de la red.
"Madrid es una región segura, pero tenemos que trabajar para que lo siga siendo, y para esto vuelvo a reclamar el apoyo y el esfuerzo de la Delegación del Gobierno", ha señalado.
Este fin de semana han fallecido dos jóvenes en distintas localidades de Madrid -uno de 21 años en Fuenlabrada y otros de 19 años en Alcorcón-, ambos por disparos de arma de fuego en la cabeza.